- 05 Abr 2017, 15:49
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En este proceso me he encontrado con varias sorpresas muy agradables, mis pies son una de ellas; lo de caminar descalzo no es nuevo para mí y en mi infancia y adolescencia, si no estaba en el colegio, la universidad o de fiesta, mantenia sin zapatos, de hecho, como les contaba anteriormente, cuando estaba entre mis 15 y mis 20 y entrenaba buceo, me tocaba trotar. Luego como adulto, bien sea en investigación o en el ambiente corporativo tuve que encerrar a mis pies.
Ayer, los estaba examinando detenidamente, me dí cuenta que mí Hallux (primer dedo, dedo gordo del pie...), está en muy buenas condiciones, se encuentra perfectamente alineado con el metatarso, tiene muy biena flexibilidad y una buena capa de piel. El quinto dedo (aquel pequeñito que gusta tanto de tropezar con los muebles), no está en tan buenas condiciones, tiene una desviación de unos 15º y esta un poco rotado sobre su propio eje. Aparte de estos horrorres, ha generado una especie de callo con un borde afilado en su zona medial, al quedar aprisionado contra el cuarto dedo.
Supongo que esto se debe a los zapatos formales (de tipo oxford) que se deben llevar en la oficina, pero hoy al ponermelos me di cuenta que mi quinto dedo se sentía particularmente incómodo, con poco espacio. Esto es algo nuevo, pues no había tenido este problema y creo que se debe a las dos semanas de entrenamiento; soy consciente que no ha transcurrido sufuciente tiempo para esperar que haya cambiado mi anatomía y este alineado, pero sí creo que está cambiando mi forma de caminar habitual y mi quinto dedo está empezando a trabajar en la fase de despegue de la marcha, eso explicaria que esté reclamando más espacio vital.
Bueno, aparte de las reflexiones, voy referirme a mi etapa de transición actual, hoy al levantarme a mi sesión en la madrugada, no tuve buenas sensaciones, el plan era completar 5 Km amortiguados pero la verdad, sentía mis pies como extraños; yo no diria que tenía dolor, pero las articulaciones me dieron una mala espina, por tanto, decidí que era mejor apelar a la razón y quedarme descansando y más bien salir mañana con toda la energía completa y hacer mis 1500 metros descalzo de entreno de rigor. Yo necesito correr para mantener mi cordura, pero entiendo que la recuperación y el descanso pueden llegar a ser tan importantes como las sesiones de carrera.
Saludos a todos.